Ha llegado el buen tiempo a Valencia, y con él, cobran especial protagonismo los espacios exteriores de nuestras viviendas. Para poder disfrutar de estos espacios al máximo, debemos tener preparadas estas zonas, para poder sacarles el máximo partido.
Si estás pensando en darle un lavado de cara a tu terraza, la primavera es el momento perfecto para comenzar el proceso y llegar a tiempo de tenerla apunto para verano. Muchas veces, no hace falta llevar a cabo una reforma de terraza integral, si no que solo necesitamos modificar los aspectos que necesiten una mejora, o detalles que le den a nuestra terraza un cambio. La reforma que más suelen solicitar nuestros clientes, es una reforma del suelo de la terraza.
Existen varios tipos de suelos para terrazas, por ello hoy os vamos a hablar de las características de cada uno, y cual se adaptará mejor según a que tipos de terrazas.
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Antes de elegir el suelo para terraza
El clima es el factor más importante a tener en cuenta para elegir cualquier característica que vaya a tener nuestra terraza, como los muebles, plantas, tejidos y por supuesto materiales para el suelo. Si el clima donde se encuentra la terraza es un clima caluroso, expuesto a muchas horas de sol, o muy frío, lo más lógico será elegir un material que soporte bien temperaturas extremas. En cambio, si la terraza se sitúa en un clima húmedo y lluvioso, lo más adecuado es elegir un suelo donde pueda circular el agua para su evacuación, y no se formen balsas de agua, a la par que impermeable, para que no se produzcan filtraciones en pisos inferiores.
También tendremos que pensar primero que muebles y estilo vamos a elegir para el espacio, pues a la hora de elegir el suelo, habrá que tener en cuenta el peso que vamos a poner encima, y el estilo de los muebles, para que no desentone con el estilo del material que escojamos. Si escogemos muebles con estilo natural, y luego ponemos un suelo de cemento, va a desentonar.
Por supuesto, nuestro estilo personal, y el presupuesto que tengamos también va a entrar en juego a la hora de elegir el mejor suelo para nuestra terraza.
Tipos de materiales para suelos de terrazas
Cerámicos
El primer material del que os vamos a hablar, es también el material más popular para vestir los suelos de nuestras terrazas. Y es que, además de sus amplias posibilidades decorativas, los suelos cerámicos, son un acierto asegurado debido a su resistencia, durabilidad, y escaso mantenimiento.
Las principales características de los suelos cerámicos son:
- Son resistentes a temperaturas extremas, y a las inclemencias meteorológicas como lluvia o nieve. Esto se debe a la poca porosidad que tiene este material, ya que lo hace impermeable. También será perfecto en terrazas que estén cerca de la playa, ya que soportan la humedad, sin que causen manchas de salitre o cal.
- El mantenimiento y la limpieza que requieren los suelos cerámicos es prácticamente nula. No hace falta que sean limpiados con materiales especiales, ni necesitan protectores ni repasos cada cierto tiempo. Además, es resistente a rayajos y golpes, por lo que no necesitará reparaciones.
- Existe una gran variedad de diseños, acabados y formatos para poder personalizar tu espacio, y adaptarlo al estilo que necesites.
Cemento
El cemento para suelos de terraza es un material que está en auge. La estética que proporciona un suelo de cemento pulido, es difícil de conseguir con cualquier otro material, creando un ambiente sobrio, a la vez que armonioso y sobre todo moderno. Este material combinará a la perfección si lo que buscas es un espacio minimalista, un estilo industrial, o sencillamente una terraza moderna.
- Este material es el más resistente de todos los materiales que puedes utilizar para el suelo de tu terraza.
- El mantenimiento es muy sencillo prácticamente no requiere limpieza, ya que es extremadamente resistente a las manchas, incluso las más complicadas como las manchas de grasa. Para limpiarlo, normalmente se hace únicamente con agua a presión.
- El principal inconveniente de utilizar el cemento es que será muy complicado quitarlo, si alguna vez queremos cambiar, por lo que hay que estar seguros de que se quiere emplear este material.
Piedra
Otro material que comparte la característica de resistencia del cerámico, es la piedra. La piedra es un material natural que aportará a tu terraza un aspecto hogareño. Existen diferentes tipos de pavimentos de piedra; las lajas de piedra, el granito o la pizarra.
Las principales características de la piedra como suelo para la terraza serán:
- Como hemos comentado, su resistencia es su principal atractivo. Al igual que el cerámico, soporta temperaturas extremas.
- Su mantenimiento es muy sencillo, se limpia sin problemas con productos comunes.
- Un inconveniente de este material es que coge bastante calor, o frío, dependiendo del clima de ese momento, por lo que puede no ser agradable andar descalzo por esta superficie.
- Al ser un material natural, cada piedra es única, por lo que tendrá su propio color y forma, lo que dará un aspecto irregular.
Madera
Los suelos de madera para exterior no suelen ser muy habituales, ya que es un material algo más caro, y con un mantenimiento más exhaustivo. No obstante, la madera presenta muchas ventajas de las cuales nos podremos aprovechar si la escogemos.
Una terraza con suelo de madera tendrá un aspecto muy atractivo, además, es un material muy agradable sobre el que caminar, ya que es cómodo y no transmite calor ni frío. El suelo de madera lo podrás combinar con muchos estilos decorativos, es un material muy versátil.
Lo más importante será escoger un tipo de madera recomendada para exteriores, como la teca, la acacia o el bambú. Estas maderas se encuentran en climas tropicales, por lo que soportan humedades, lluvias y altas temperaturas. La instalación más común es mediante tarimas de madera.
Césped artificial
Esta opción no es la más común pues presenta algunos inconvenientes que no encontramos en el resto de materiales. Las principales desventajas son la dificultad de su limpieza, y la durabilidad. Al ser una superficie irregular, cuesta mucho mantenerlo limpio, y eliminar resto de suciedad. Debido también a este factor, es un material que necesita sustitución cada cierto tiempo por lo que a la larga no sale rentable.
Aun así, si escogemos incluir césped artificial, vamos a conseguir un aspecto natural y alegre en nuestra terraza, además de una superficie cómoda y agradable. Como opción, podemos utilizar el césped artificial solo en una parte de nuestra terraza, no en toda la superficie.
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